Una confusión es la fusión de la verdad fundida en la mentira.
Por este camino no se puede transitar sin confundirse,
se necesita la incertidumbre,
se necesita trasladar una idea para siempre antes dudarla.
Yo no creo en el absolutismo,
siempre se confunde todo,
lo que mis ojos ven, hasta lo que mi cabeza le cuenta a mis ojos.
Tan sólo veo lo que pienso.
Es lo que pienso y puedo pensar distinto.
Siempre busco una solución,
siempre encuentro una gran confusión enlazada con diez preguntas.
Me concedo el reinado de la Confusión,
Me reestructuro de mis viejas ideas y siempre después de la duda
esta una solución.
Si siquiera siguiera las huellas de otros estaría imitando
Pasos que no son míos,
soluciones sin evaluaciones.
Por acá hay que confundirse,
fundirse en otras ideas, naufragar horas de especulaciones.
Todo origen evolutivo fue confusión,
Toda innovación fue incertidumbre pura.
Todo es como se mueve, así funciona la vida a diario,
Todo se llama rutina;
pero
esa es tan sólo la verdad
de una sociedad en donde crecimos
y
aprendimos a no confundirnos.
Confundirse es la fusión para estrenar una nueva función de valores.
Se confunde, se pierde, se pregunta, se cambia quizá.
Cada cerebro un universo; no se puede ver más allá sin confundir todo.
