Vísperas de primavera,
Innovado y revolucionario sentimiento.
Mi búsqueda termina en inhibición,
El talento desbordado por el vació,
¿Por qué el vació?
No lo se,
Mi mundo equívocamente se desplaza,
Siento;
Pero nunca percibo nada.
¡Rayos a mi alma!
Padezco una infección lenta y a la vez estable,
Los días marcan mis ojos, y
Mis ojos nerviosos ven muy poco.
Al formular y reformular, siento que he
Vencido el azar,
El destino es donde me lleva el viento.
¡Ay¡ la novela de mi cuerpo
He leído,
El cambio de mi respiración,
La tensión en la espalda…
Todo indica que voy detrás
De la felicidad;
No soy feliz.
Soy patriota de mi vida
Enfrento monstruos, fantasmas
Termino con los ojos desorbitados y
Un lenguaje lento,
Abatido, buscando razones,
Razones que no existen.
Cuando las palabras son sonidos
Y pienso sin hablar,
No hay que agregar mucho,
Es que estoy decepcionado
De la vida.
Algo inocente inadvertido
Se esconde en mí,
Algo osadito y siniestro,
Como balance reprimido
A un potencial no explotado,
Memoria reciente y consiente,
Ideas poderosamente inusuales
Circulo vicioso del caos,
Implosión veloz de mi universo.
¡Felicidad¡
¿Será que la conozco?
Pueda que sea un suceso pequeño emocional,
Pueda que la vida para mí,
Es solo observación,
Puede resultar que aunque tenga los ojos
Sanos,
Vea tan diferente
Que he perdido mi especie.
Mi soledad condena; pero no mata,
Mi necesidad existe;
Pero no busco,
Mis sentimientos son verdugos;
Pero no muero.
Densa y condensadas ganas de gritar:
¡Triunfo!
Me encuentro mudo.
Aunque vaya en contra de todos los esquemas,
Solo mi carne sabe mi dolor,
Feliz, feliz; no soy casi toda
La jornada; pero
En milésima de segundos al día,
Siento dentro de mi corazón el poder
Inexplicable que explica mi existir.
¿Felicidad sin haber llorado?
Imposible…
Innovado y revolucionario sentimiento.
Mi búsqueda termina en inhibición,
El talento desbordado por el vació,
¿Por qué el vació?
No lo se,
Mi mundo equívocamente se desplaza,
Siento;
Pero nunca percibo nada.
¡Rayos a mi alma!
Padezco una infección lenta y a la vez estable,
Los días marcan mis ojos, y
Mis ojos nerviosos ven muy poco.
Al formular y reformular, siento que he
Vencido el azar,
El destino es donde me lleva el viento.
¡Ay¡ la novela de mi cuerpo
He leído,
El cambio de mi respiración,
La tensión en la espalda…
Todo indica que voy detrás
De la felicidad;
No soy feliz.
Soy patriota de mi vida
Enfrento monstruos, fantasmas
Termino con los ojos desorbitados y
Un lenguaje lento,
Abatido, buscando razones,
Razones que no existen.
Cuando las palabras son sonidos
Y pienso sin hablar,
No hay que agregar mucho,
Es que estoy decepcionado
De la vida.
Algo inocente inadvertido
Se esconde en mí,
Algo osadito y siniestro,
Como balance reprimido
A un potencial no explotado,
Memoria reciente y consiente,
Ideas poderosamente inusuales
Circulo vicioso del caos,
Implosión veloz de mi universo.
¡Felicidad¡
¿Será que la conozco?
Pueda que sea un suceso pequeño emocional,
Pueda que la vida para mí,
Es solo observación,
Puede resultar que aunque tenga los ojos
Sanos,
Vea tan diferente
Que he perdido mi especie.
Mi soledad condena; pero no mata,
Mi necesidad existe;
Pero no busco,
Mis sentimientos son verdugos;
Pero no muero.
Densa y condensadas ganas de gritar:
¡Triunfo!
Me encuentro mudo.
Aunque vaya en contra de todos los esquemas,
Solo mi carne sabe mi dolor,
Feliz, feliz; no soy casi toda
La jornada; pero
En milésima de segundos al día,
Siento dentro de mi corazón el poder
Inexplicable que explica mi existir.
¿Felicidad sin haber llorado?
Imposible…
