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miércoles, 29 de diciembre de 2010

Evasiva personal


Me buscaste Flirteando francamente, sutilmente, diplomáticamente,
con artimañas y ardid femenino.

No es que no quiera ceder, soy demasiado tímido deberías saber.
Me he vuelto demasiado astuto para huir.

Me mirabas con ternura, cuando entraba al territorio de tu oficina;
no obtenías resultados después de tanta simpatía e interés.

Me contaste tu intimidad, persuadiendo con la psicología
de que quizá charlar de tu ex pareja pudiera despertar algún
celo en mí.

Me buscaste seductoramente y también vestida de Julieta.

Me buscaste coqueteando con faldas cortas y escote en potestad.

No lograbas hacer mella, soy demasiado tímido.
Siempre estoy pensando en otra cosa.
Ya sabes me he vuelto un escapista.

Me buscaste como niña encaprichada con ojos color lujuria.
Como señorita, amable y respetuosa.
Como a un objetivo, como si fuera el último hombre,
Como Colón busco América, como los faraones la inmortalidad.

No es que no tenga interés, simplemente me ruborizo de timidez.

Me buscaste luciendo tus piernas en enero, febrero, marzo,
en diferentes fechas y horarios.

Me buscaste con un beso en la mejilla tocando mi labio.
Invitándome un café… invitándome…, con planes, estrategias,
planos, frontales y laterales.

No es que sea tan lento, simplemente me causas una
Inevitable atracción, embeleso y fascinación.
Tengo el temor de enamorarme, entonces evado, eludo, huyo.

Porque el día que yo ceda, vas a ser tú quien huya frenéticamente.

"la soledad"


Cuando el sueño se trasforma en vigilia,
pude oír a las paredes de mi habitación murmurar.

La mesa llena de recuerdos y poemas me miraba como diciendo:
¿Dónde esta tu amor?

En mi pecho mi corazón parecía sobresalirse,
se quería escapar, huir de esta fría habitación.

Los sonidos del silencio gritaban ironías a mis oídos y
la pregunta llego a mi frente –
¿Dónde está tu amor?

Allá afuera oía a los perros ladrar,
no se que decían, solo se que la noche es asesina de poetas.
Si suena a un absurdo, esta es mi absurda realidad.

Déjame un poema decía el viento; no quise oír.

Una luna brillante y menguante, como por mera casualidad
se vio através del cristal, convenciendo a mi iris que ella es mi amor.
Deje de mirarla.

Mire a mi interior, ahí me estaba esperando la imaginación,
que en mi mente decía: déjame ser tu amor;
deje de imaginar para resolver la lógica ecuación y
pensar donde estará mi amor.

Cuando daba por terminada esta dulce y melancólica poesía.

Oí una voz muy tierna susurrar una frase a mi oído.
(Temí porque mi habitación estaba vacía)
- ¡déjame ser tu amor, que es la única que tienes,
yo soy tu verdad, la cual jamás te voy abandonar!

¿Quién eres?- pregunte confuso y con miedo.

-yo soy tu reina, tu amor, déjame besarte entre estos versos vacíos.
Yo soy la “soledad”.

Desconcertado no sabia que contestar;
pero cupido ya había herido de amor mi corazón.

-déjame ver si este poema lo quiere quien es dueña de mi amor,
Si este poema llega a sus manos y de sus manos al corazón.

¡OH! Soledad de mí te podrás olvidar…

lunes, 20 de diciembre de 2010

VOY A ALABAR LA VIDA



Bello amanecer me sorprendía dormido,
Voy a envolverme en tu luz abriendo los ojos sorprendido.

Vísperas de alegrías en donde derramar las sonrisas del día.
Lejanías de sueños marchitos,
iluso resplandecer autosuficiente.

Voy a despertar esa voz desde el inconciente hasta llegar al presente.

Que mis lágrimas sean lentes para ver mejor el sol;
Que las dudas queden en la penumbra de lo incierto

Una y otra vez voy a alabar la respiración.
(Condensar la idea sino me arrepiento)

Voy a saltar a la vida;
Aunque mi voz se escuche desde la ultratumba,
Voy a alimentarme como la tierra lo hace con la lluvia.

Voy a pintar con acuarelas mi vieja sonrisa.

Tiempo al tiempo;
del cenit nacerá el fénix desde su cenizas.

Luna de dudas desproporcionadas, estrellas furtivas de una noche eterna.

Voy a respirar el aliento nocturno hasta quedarme dormido,
que esas noches desiertas tengan su sonido,
con fantasmas y heridas….
Voy a alabar a la vida.

No será más un círculo vicioso de sueños, laberinto sin salida.

Te doy mi egoísmo para compartirlo con tu corazón.

¡Otra vez me siento vivo!
Aunque esté muriendo.
No renuncio a mis sueños, a la ilusión, ni al amor.


Voy a saltar a la vida a beber sangre cristalina, y hacerme fuerte.

Voy a verificar todas las salidas,
Darle a la vida ese trozo de adrenalina.

Voy a gastar las reservas de fuerzas para una vida que recién comienza.

Voy a regalarte mis sueños y temores.
Hacer en tus ojos matices de colores.
Voy a alegrarme la vida, para que la soledad sea suicida.

Voy a hacerte una canción.

Vamos a saltar a la vida.
¡TOMA MI MANO Y VAMOS!

INSEGURIDAD


Radicales libres cruzando fronteras.
Células que mueren a cada instante.

La seborrea en una emboscada al rostro, bruxismo y estrés.
Un pequeño derrame en los ojos como si hubiera fumado hachís.

Las ojeras de del insomnio de la noche anterior;
siempre la inseguridad que amordaza mi cociente intelectual.

Me convertí en un ermitaño anacoreta.

Es casi las 2:00 de la madrugada y no quiero dormir.
Como amigo tengo libros de grandes celebridades que marcaron la historia,
Como enemigos tengo a todos los que no me conocen.

Tengo tanto tiempo para la soledad, que ella se va a enamorar de mí.

No recuerdo el último beso, tampoco lo extraño.
Salgo a fuera a fumar un cigarrillo, bocanada a bocanada,
Como un tonto me quedo mirando las estrellas.

Por deber tantas materias de la vida, hoy rindo todas,
Con total y relativa inseguridad.

Soy tan susceptible a simple vista en mi interior.

La fe me mantiene en pie .no es el mejor momento para sonreír;
sin embargo yo quiero vivir.

Prefiero ahogar mis penas en un poema, que en un bar.

Existencia por existir.
Miedo por acción.

Sin amor por inseguridad.

EL MUNDO DEL REVÉS


Puede caer el planeta desde su hilo de gravedad.
Puede un ángel llevarme el corazón y lo demás.

Puede el sol entristecer en su eclipse total.
Puede la luna en esta noche no brillar.

Puede el mar convertirse en sequía.
Puede esta lagrimar no encontrar salida.

Puede la muerte dejar cunas vacías.
Puede la guerra devastar toda la tierra.

Puede el cielo no tener dios hoy.
Puede la melancolía dejarme sin voz.

Pueden decirme quien sos…

…el mundo de revés…

Puede ya no encontrar más razón la verdad.
Puede hoy la indiferencia reinar.

Puede hoy mi dolor festejar.
Pueden mis locuras pasear.

Puede hoy una rosa marchitar.
Pueden mil ojos aconsejar.

Puede una mano sacarme el puñal.
Puede este mundo robarme lo que más puedo amar.

Pueden decirme quien soy…

… El mundo del revés...

domingo, 12 de diciembre de 2010

viajando, lejos, lejos.


Viajaba cuando caminaba y caía,
cuando la mesa era enorme y miraba a las persona hacia arriba.

Un camión a gran velocidad se estrella con un auto de colección
en el desierto del arenero.
Soñaba, jugaba, viajaba.
En mi corta existencia, explorando encontré a otros.
No se parecían a mí;
Pero yo sabia que eran iguales y
Juntos, jugamos, pensamos, viajamos y deje al olvido aquel arenero que fue mi amigo.

Lejos de mi ruta.
El desierto, sus vehículos con calcomanías borrosas y sumergidas
en el río de las lluvias de verano.
Una manta de hierba lo dejo al destierro.

Lejos de mi ruta, lejos, es por estas calles donde voy
Riendo de la vida. En compañía.
Entrando a la estación de los extasiados.


Viajando, lejos, lejos.

En mi viaje estoy ausente, dejo mi cuerpo, me siento seguro.
Construyo una barrera y nada puede hacerme daño,
ni siquiera los años, y
nada puede hacernos daño.

Soy el mejor y somos los mejores.

Viajaba cuando caminaba y caía,
cuando la mesa era enorme y miraba a las persona hacia arriba.

Un camión a gran velocidad se estrella con un auto de colección
en el desierto del arenero.
Soñaba, jugaba, viajaba.
En mi corta existencia, explorando encontré a otros.
No se parecían a mí;
Pero yo sabia que eran iguales y
Juntos, jugamos, pensamos, viajamos y deje al olvido aquel arenero que fue mi amigo.

Lejos de mi ruta.
El desierto, sus vehículos con calcomanías borrosas y sumergidas
en el río de las lluvias de verano.
Una manta de hierba lo dejo al destierro.

Lejos de mi ruta,
Lejos, son estas calles donde vamos,
Lejos de este mundo, lejos de la mente.
En el futuro y en el presente.
El tiempo nos ve; pero aquí no estamos.

En mi regreso, todos se miraban con ojos de desconocidos.
(Ya nadie reía) cualquier cosa nos hacia daño,
Me di cuenta que el viaje fue un engaño.
Viajamos por años hacia la nada del intelecto.

No aprendimos nada porque aquí no estábamos.

Hoy vuelvo a mi arenero, arrancando hierbas entre
la arena sucia, tratando de reconstruir los vehículos.

¡Todo es tan distinto!
(Fue un viaje largo)
La mesa es pequeña. Hoy trato de partir corriendo desde el arenero,
cuidando el tiempo como si fuera el mismo oro.

el naufrago y la botella


Terminaron los días de naufragio.
Las aguas del mar me llevaron a orillas de una exótica isla.
Después de tantos días en donde las aguas era el timonel de mi bote inflable.

Entre el enorme cielo y la infinidad del mar trascurrieron mis días
hasta que la costa de esta isla me dieron una esperanza de vida.
Con escasos sustentos me encuentro,
esperando que alguien me pueda rescatar;
la ultima galletita y el último trago de cognac.

Una pluma que escribe sin parar una mano que tiembla,
unas hojas amarillentas que navegan por el infinito mar
através de una botella de cognac.
El sol se eleva y cae perdiéndose en el horizonte, una y otra vez.
No hay respuestas si alguien encontró la botella con sus hojas amarillentas.

La botella naufraga, en busca de alguien,
los inmensos buques se muestran indiferentes,
cortan las aguas, adornan el mar; pero las olas bruscas alejan la botella.

Una ballena despide vapor con su expiración justo debajo de la botella,
sin alas, pero cerca de las gaviotas,
de regreso una vez más contra el agua se azota.

Surfeando en las olas va, va, va sin destino.

Distraída la botella en presencia de las luna y sus estrellas,
contra una gigantesca roca se estrella, añicos de ella.
Una gota de cognac que se mezcla con el mar.

Las hojas imitan el movimiento de las carpas marinas y
las astillas de cristal toman la delantera anclándose en las algas.
Mientras lentamente los peces ven descender a las hojas en su fin,
despidiendo tinta de sangre azul.

Mientras tanto en una isla. Un naufrago de cabello largo al igual que su barba.

Espera una respuesta.
Sentado sobre una roca, con una mirada profunda y desconcertada
donde se puede leer:”melancolía”.

Débil agonizando en espíritu, leyendo una novela que se sabe de memoria.
Observando una palmera, para ver si un coco en su caída,
con una piedra de despliega. Anímicamente le es imposible
treparse a una palmera.

Una sonrisa se dibuja en su rostro;
Se levanta, mira las extensiones de las aguas con los ojos perdidos,
allá a lo lejos donde se une el cielo con el mar.

Sueña, sueña con la esperanza de que la botella se encuentre en la red
De algún barco pesquero.
Entre su sonrisa es obvio ver, que en su pensamiento imagina
algún marinero relatando su mensaje en voz muy alta.

Quien le dirá que:
Distraída la botella en presencia de las luna y sus estrellas,
contra una gigantesca roca se estrella, añicos de ella.
Una gota de coña que se mezcla con el mar.

Las hojas imitan el movimiento de las carpas marinas y
las astillas de cristal toman la delantera anclándose en las algas.
Mientras lentamente los peces ven descender a las hojas en su fin,
despidiendo tinta de sangre azul.

miércoles, 8 de diciembre de 2010

HE PERDIDO INSPIRACIÓN.


Algo no me deja pensar.
He perdido inspiración.
Encuentro desencuentro. Un beso en el closet diez bolígrafos y
mil cuadernos.


El tic tac del reloj lo comparo con el latido de mi corazón.

La sombra de las ramas en el cristal de la ventana
hace una sombra chinesca.
(Parecen golondrinas que van de aquí para allá)

Un libro de literatura que se me perdió.
Un cuadro de una adolescente en la época medieval,
un oso panda en mi cama.
Es lo único que abrazo cuando te encuentro soledad.

Algo no me deja pensar.
He perdido inspiración.
Encuentro flores plásticas.

Crisis de poeta.
Puedo ver las estatuas de las que hablaba Becquer,
Hobbes me bajaría el pulgar.

Un diccionario que no sabe el significado de “amor”.
Me sobra oxígeno, me falta inspiración.

Mis ojos utópicos, por eso siempre llevo lentes de sol
Para que nadie plagie mi mirada.

Cromosomas intactos.
El viento canta una lira,
sobredosis de café.

Algo no me deja pensar.
He perdido inspiración.

Mi universo de métricos versos no va en expansión.
Caos de inspiración sin tocar el intelecto, implosión

Arte obligatorio para imitar el alma,
ese mismo que hoy me limita.

Anacoreta del siglo XXI.
Triunfo del lagrimal.
Yo conozco ese recorrido que termina en mi boca,
como agua del mar,
Como agua del mal.

¡Savia de los sabios que la leyendaria memoria los consuela!

Algo no me deja pensar,
He perdido inspiración.

Te busco en lo ibérico, en lo barroco, en lo gótico, en el latín:
“ars gratia artis”,
En lo vulgar, en la sima y la cima.
Simple o complejo.
Todo lo condensan mis ojos.
Todo lo siente.
Todo lo busca en la translación de exilio a inspiración.

Algo no me deja pensar.
He perdido inspiración.
El amor no me deja pensar. He perdido inspiración.

“tengo tan poco para escribir y tanto para decir”

"NADIE TE REGALA NADA"


Aprendí de los años que nadie te regala nada.

Aprendí de la universidad de los sueños rotos;
Que un beso tienes que ir a buscarlo. “nadie te regala nada”

Aprendí en el doctorado de caminos de tierra y asfalto,
que ni siquiera cartón para cubrirte en las noches heladas
es gratis.

Un beso por un verso,
un verso por un beso es una estafa.
“nadie te regala nada”

Aprendí de los días sin límite,
que una línea de cocaína servida en la mesa.
No es un regalo, es una estafa del consumidor
Para no sentirse sólo.
“Nadie te regala nada”

Aprendí que los amigos están más en las buenas que en Las malas.

Aprendí que cuando la limosna es grande se mira de reojo.
“nadie te regala nada”

Aprendí en la facultad de psicología nocturna,
Que quien te escucha, o no te mira a los ojos o esta dormido.

Aprendí que aprendiendo todo y no haciendo nada es otra estafa.
“nadie te regala nada”

Aprendí en la escuela de teología agnóstica,
que nos mentimos para elevar el ego.

Me encontré una madrugada juntando monedas para el pasaje
a la tierra prometida.
Entendí que las promesas a veces están hechas a base de tierra.
“nadie te regala nada”
Por tal razón muchos venden el cuerpo. Otros el alma,
Algunos la mentira, la amistad, la ilusión, la dignidad y
Hasta te venden un looks.
“nadie te regala nada”

LA HISTORIA DE AQUEL DÍA


Nuestra historia quedo sujeta en el tiempo.
Hoy el recuerdo lo trajo a mis orillas por el viento.

Sé que callé tantas veces, como tantas veces te grite
en mis pensamientos.

Estas ausente de los besos tiernos del presente;
Pero tu imagen de primavera se enreda entre mi mente.

¡Ahí estas! Con aroma de azaleas, aloes y jazmines
Iluminas todo el follaje del reflejo de mis ojos cuando ríes.

Los robles, nogales, fresnos y sauces de rama caídas,
fueron testigos de los versos que oías;
de las palabras que mis ojos decían.
Aquellos días que sentados en la plaza reíamos.

Tomaste mi mano cuando te regale aquella rosa,
Te bese y la lluvia empezó a caer lentamente.

El tiempo se detuvo para nosotros dos y
estábamos mojados pero al amor no le importo.
Nos separo la rosa que en mis manos su espina clavó,
Mi mano sangró (no se la razón)
Pero su espina aun sigue en lo más profundo de mi corazón.
Hasta el día de hoy.

La lluvia limpiaba tus ojos o tus lagrimas era lluvia del ayer.

Hoy estoy en un día de sol junto a los pinos, eucaliptos,
alcanfores, paraísos y álamos.

¿Como me puedes olvidar?
Si yo te llevo en la fosa oscura de la memoria iluminada por tu nombre.

Cada vez que te pienso, tu recuerdo sombría el sol,
Como en banco de la plaza aquella vez.
Mis ojos lloran tu ausencia mojando mis penas.
Como la lluvia la plaza.